Caja portamensajes.

«Hay un millón de historias en la ciudad de Nueva York… y ésta es una de ellas», comenzaba diciendo el narrador de una vieja serie de TV norteamericana de los años 60: «La Ciudad Desnuda».

En Montevideo, capital del Uruguay,  somos poco más de un millón trescientos mil habitantes.Y ésta es una historia:

Uno de los objetos más curiosos de mi colección, refiere a una experiencia personal, un hallazgo fortuito, que tuve hace unos cuantos años, en plena calle del centro de Montevideo. No es precisamente referida a la Radio,  pero es una anécdota más, de esas mágicas, que se me han presentado a lo largo de mis años vinculados, de una u otra manera,  al mundo de la Comunicación.

Todos conocemos las historias de las botella lanzadas al mar, portando algún mensaje.

Nunca ví ni encontré alguna, hasta ahora, en ninguna playa de las que he caminado. Ni en la orilla de la playa capitalina, siquiera en las de aguas océanicas;  cuando caminando al atardecer me imaginé muchas veces, tras otear el horizonte, que, quizá alguien, desde otras playas, desde más allá, detrás de esa línea que aparentemente separa el cielo y la tierra, un día hubiera lanzado un mensaje prisionero y estanco en una botella… Y que justo, lo encontrara. Pero no hice la noticia.

quoteLeftLos mares y océanos son inmensos… ¿qué posibilidades tenemos de que al tirar una botella al mar, esta sea recogida a miles y miles de km? La verdad es que la mayoría acaban dando la vuelta al mundo sin apenas tocar tierra, pero se han dado casos sorprendentes y documentados en la Historia que despiertan nuestro asombro. Frágil como es, una botella bien cerrada es uno de los objetos más “marineros” del mundo. Los huracanes y las grandes tempestades pueden hundir grandes barcos, pero la mayoría de los envases de vidrio no hay quien los hunda…

    El caso más rocambolesco fue quizás el de Chunosuke Matsuyama, un marino japonés que naufragó con 44 compañeros en 1784. Poco antes de que él y sus compañeros murieran de hambre en un arrecife de coral del Pacífico. Matsuyama escribió un breve relato de su tragedia en un pedazo de madera, lo selló en una botella, y la arrojó en el mar. La botella estuvo durante 151 años a la deriva hasta que 1935 arribó a la costa del pueblo donde había nacido nuestro personaje. Un caso impactante cuanto menos…» ¹

El hallazgo que nos concierne, fue bien ciudadano. En vez de olas y el verde profundo del mar, el océano fueron las baldosas gastadas de la vereda. Tampoco descansaba en la orilla y en la arena. Estaba allí, a centímetros de la pared, sóla. Esperando que alguien la descubriera.

Nadie la había visto ni tomado antes…

Así pues, doblando una esquina céntrica, en el suelo estaba esa cajita tirada, con una etiqueta que me llamó la atención. Ya no era visible su marca (por ello hubiera pasado inadvertida). Su autora le había dado otra función.

Dentro de esa caja de cerillas, había una diminuta carta o mensaje, escrita a mano, en una papel plegado ocho veces.

La caligrafía, indiscutiblemente caracteristica de una mujer, joven sin duda.

No voy a transcribir su texto.

He aquí, sus dos carillas.

El propósito original de establecer una cadena de confesiones escritas en un papel, y contenidas en una cajita de fósforos, no se cumplió. Sólo alcanzó un eslabón.

Tan sólo, una muestra de la necesidad humana de confesión, anónima en este caso, que muchos de los seres que pueblan esta ciudad, como en cualquier ciudad del mundo quizá, necesitan hacer.Y que luchan contra la incomunicación.

Quizás desbordada por sus preguntas, contradicciones, miserias, penas o alegrías existenciales, «Rosana del Centro» se las ingenió para que al menos otra persona, leyera y guardara su mensaje, su confesión; intransferible por cierto, pero al que dio toda la intención de hacerla trascender más allá de su mente. Y que, a su vez, quien la recibiera, fuera otra vez, vehículo de otra confesión de parte, sin destino cierto.

Sin mojarse los pies… sin ir a la costa. Lanzada de un bolsillo, en cartón y papel.

Es hoy, tan sólo, un preciado objeto de mi colección personal.

Hoy día, quizá, los mensajes en botellas lanzadas al mar, vengan con un USB adentro.


¹ «Un mensaje en la botella».  Autor: Felix Casanova, en el blog «Historias de nuestra Historia». 2010. (Visto en 15 de setiembre de 2014).


The Police – Message In Bottle 

Just a cast away an island lost at sea-o                   
Another lonely day, no one here but me-o
More loneliness than any man could bear
Rescue me before I fall into despair-o

I’ll send an S.O.S. to the world
I’ll send an S.O.S. to the world
I hope that someone gets my
I hope that someone gets my
I hope that someone gets my message in a bottle yeah
Message in a bottle yeah

A year has passed since I wrote my note
But I should have known this right from the start
Only hope can keep me together
Love can mend your life but love can break your heart

I’ll send an S.O.S. to the world
I’ll send an S.O.S. to the world
I hope that someone gets my
I hope that someone gets my
I hope that someone gets my message in a bottle yeah
Message in a bottle yeah
Oh message in a bottle yeah
Message in a bottle yeah

Walked out this morning I don’t believe what I saw
A hundred billion bottles washed up on the shore
Seems I’m not alone in being alone
A hundred billion castaways looking for a home

I’ll send an S.O.S. to the world
I’ll send an S.O.S. to the world
I hope that someone gets my
I hope that someone gets my
I hope that someone gets my message in a bottle yeah
Message in a bottle yeah
Message in a bottle whoa
Message in a bottle yeah

Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
I’m sending out an S.O.S.
I’m sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.
Sending out an S.O.S.

Songwriters: Sumner, Gordon Matthew

Message In Bottle lyrics © EMI Music Publishing. ²


 

Letra en español de la canción de The Police, Message in a bottle, (letra traducida) ³:

Simplemente un náufrago.
Una isla perdida en el mar.
Otro día solitario
con nadie aquí más que yo.
Más soledad
de la que ningún hombre puede resistir.
Rescatadme antes de que caiga en la desesperación.

Enviaré un SOS al mundo.
Enviaré un SOS al mundo.
Espero que alguien reciba mi
mensaje en una botella.

Ha pasado un año desde que escribí mi nota
pero debería haber sabido esto desde el principio.
Sólo la esperanza puede mantenerme cuerdo
El amor puede arreglar tu vida
pero el amor puede romper tu corazón.

Enviaré un SOS al mundo.
Enviaré un SOS al mundo.
Espero que alguien reciba mi
mensaje en una botella.

Salí a caminar esta mañana,
no puedo creer lo que vi.
Cien mil millones de botellas
arrastradas por la corriente hasta la orilla.
Parece que no estoy solo en esto de estar solo.
Cien mil millones de náufragos
en busca de un hogar.

Enviaré un SOS al mundo.
Enviaré un SOS al mundo.
Espero que alguien reciba mi
mensaje en una botella.

Emitiendo un SOS

sep

 

Esta entrada fue publicada en 2005, coleccionista, Documentos, ephemera, Frases, memorabilia, Montevideo, textos, Uruguay y etiquetada , , , , , , , , , . Guarda el enlace permanente.

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