
A fines de los 30, 40s, una exquisita mujer propalaba su mensaje radiofónico a través de la emisora Radio Carve, CX 16, y también CX48 Radio Femenina.
Se convirtió en predilecta de los radioescuchas que buscaban palabras de vida.
Era la muy sensible Elizabeth Durand que en su programa «Mientras se vive», conmovía a todos con sus dotes de charlista radial.
Esa audición estaba en horario de la tarde y competía con los famosos radioteatros.
Aun así, lograba gran audiencia en esas horas donde los melodramas y folletines eran tan escuchados. Sus palabras tenían un mensaje que reivindicaba la espiritualidad sobre el grosero materialismo y para sus oyentes esa audición se convirtió en un remanso de paz.
Su cálida voz lograba el milagro de que los vecinos abandonaran por unos instantes su radioteatro favorito para escucharla.
Así era Elizabeth Durand, pura vida brillando en el éter.
Fuentes:
- Texto tomado y reproducido íntegramente de la nota «Voces en el Éter» perteneciente a la serie «Prohibido para Nostálgicos» de don Luis Grene que se publicó de manera ininterrumpida entre 1997 y 2011. https://www.lr21.com.uy/comunidad/275068-voces-en-el-eter –editado).
- Imagen tomada de revista Cine Radio Actualidad, 1937, Montevideo. (https://icau.mec.gub.uy/innovaportal/v/31658/72/mecweb/la-prensa-es-mujer).
Agradecimiento
- Angel Luis Grene, Montevideo, Uruguay.